
El presidente Donald Trump firmó el martes una orden ejecutiva sobre “vigilancia segura para comunidades seguras”.
El mandatario comenzó su discurso diciendo: “Gracias a todos ustedes por estar aquí. Tomamos una histórica acción para ofrecer un futuro de seguridad para los estadounidenses de todas las razas, religiones, colores y credos”.
La orden motiva a las agencias policiales de todo el país a adoptar las mejores prácticas sobre el uso de la fuerza. También requiere el intercambio de información sobre los oficiales que participan en mala conducta.
“Nadie quiere deshacerse de ellos más que los buenos policías”, dijo Trump.
La orden ejecutiva también lanza un programa de corresponsabilidad en el que los trabajadores sociales y de salud se unirían a los oficiales en llamadas no violentas.
“Brindaremos más recursos para los corresponsales, como los trabajadores sociales, que pueden ayudar a los oficiales a manejar estos complejos encuentros”, dijo Trump

A raíz de la muerte de George Floyd, la orden incluso aborda el uso de la rodilla en el cuello y los estrangulamientos por parte de los agentes de la ley como táctica.
“Los estrangulamientos serán prohibidos excepto cuando la vida de un oficial esté en riesgo”, dijo Trump.
Los críticos sostienen que la orden ejecutiva no llega lo suficientemente lejos.
Al Sharpton lo llama tuitear “desdentado”, “No necesitamos estudios. Necesitamos policías que cometan crímenes para ser castigados. Todos los policías que usan estranguladores afirman que sus vidas fueron amenazadas. ¿Qué hay de nuevo?”
“Lo que se necesita ahora no es avivar el miedo y la división”, dijo Trump. “Necesitamos unir a la policía y las comunidades, no separarlas”.
La orden ejecutiva no llega a prohibir las ordenes de allanamiento, que son una demanda importante para las protestas en curso en todo el país.